Origen de la samba
La samba es de origen africano y la música nacional de Brasil.
Origen de la samba brasileña
La samba brasileña surge de la fusión de estilos musicales africanos y brasileños.
Es una de las principales expresiones de música popular en Brasil, es un género musical que surge de la fusión entre el jongo, la «dança de roda» de origen bantú y toques del candomblé de los negros de Bahía, Pernambuco y Maranhão.
Esos ingredientes junto con otros de origen indígena, dan origen a principios del siglo XX al género conocido como samba de la mano de Noel Rosa, Pixinguinha, João da Baiana, Heitor dos Prazeres y Sinhô entre otros.
El toque final fue dado en la casa de Tia Ciata, madre se santo baiana que reunía a los malandros y los mejores músicos y compositores del momento.
Aquellos encuentros y fiestas, terminaron convirtiéndose en una tradición para muchos sambistas.
La casa de Tia Ciata
La casa de Tia Ciata en la Praça Onze se convirtió en el punto de encuentro tradicional de todos los personajes de la samba carioca.
La Praça Onze comenzó a ser conocida como «Pequena África» por ser centro de reunión de los negros bahianos y los ex-esclavos que vivían en los morros próximos al centro de la ciudad.
La casa de Tia Ciata, en la calle Visconde de Itaúna 117, se convirtió en la capital de la «Pequena África».
Las llamadas «Tias baianas» tuvieron un papel fundamental en el escenario que dio origen a la samba en Río de Janeiro a finales del siglo XIX e inicios del XX.
Además de divulgar la cultura popular traída desde Bahía, eran sacerdotisas de cultos y ritos de tradición africana.
Grandes anfitrionas de fiestas, reunían a la comunidad y ésta inundaba los encuentros de música y danza.
Las fiestas llegaban a durar varios días.
En esa época, vivían Tia Amélia (madre de Donga), Tia Prisciliana (madre de João de Baiana), Tia Veridiana (madre de Chico da Baiana) y Tia Mônica (madre de Pendengo y Carmen do Xibuca). Sin embargo, la más famosa de todas fue Tia Ciata, en cuya casa nació la samba.
Entre sus frecuentadores habituales se encontraban Pixinguinha, Donga, Heitor dos Prazeres, João da Baiana, Sinhô y Mauro de Almeida.
Normalmente, la polícia perseguía este tipo de encuentros, pero Tia Ciata tenía fama de curandera y quiso la suerte que el investigador y chófer de la policía conocido como Bispo, solicitara sus servicios para curar al entonces presidente de la república, Wenceslau Brás.
El presidente tenía una herida en la pierna que ningún médico conseguía curar.
Tia Ciata invocó un orixá y le dijo que tenía que colocarse una pasta hecha con hierbas durante tres días. Wenceslau Brás, se curó.
Se legalizan las escuelas de samba
En 1935, el entonces prefeito de Río, Pedro Ernesto, legalizó las escuelas de samba y oficializó los desfiles.
Antes de eso, sin horario ni recorrido fijo, los grupos pasaban por la Praça Onze delante de las casas de las «Tias baianas».
Eran consideradas madres de la samba y del carnaval de los pobres. La casa de Tia Ciata era una parada obligatoria pues ella era la más famosa y respetada por la comunidad.
Hasta el día de hoy, las «Tias» son representadas y homenajeadas en los desfiles de carnaval, todas las escuelas de samba cuentan con un ala de bahianas.
Fue en una de las reuniones en casa de Tia Ciata que nació «Pelo telefone».
Registrada por Donga y Mauro Almeida es considerada la primera canción de samba grabada, y permitió que el nuevo género musical saliera de los morros para llegar a la ciudad.
Samba carioca
A medida que la samba fue consolidándose en Río de Janeiro, pasó a sonar en la radio y a difundirse desde los morros hasta los barrios de la zona sur en Río.
Inicialmente criminalizada, la samba acaba conquistando a la clase media.
Las innovaciones rítmicas de los sambistas de Estácio de Sá (Deixa Falar), alcanzaron los morros de Mangueira, Salgueiro y São Carlos, y con ellos a sus compositores: Cartola y Gradim (de Mangueira), Canuto (de Salgueiro), Ernani Silva y O Sete (de subúrbio de Ramos).
Y posteriormente: Nelson Cavaquinho, Carlos Cachaça y Geraldo Pereira, Paulo da Portela, Alcides Malandro Histórico, Manacé, Chico Santana, Molequinho, Aniceto do Império Serrano.
Acompañados por un pandero, un tamborín, una cuíca y un surdo, estos compositores terminaron por definir las características del nuevo samba urbano.
La samba hecha en Estácio de Sá junto con los sambistas de los morros cariocas acabó por conocerse como la samba por excelencia, la auténtica samba de raíz.
Evolución de la samba de raíz
Durante varios años la samba sufrió modificaciones y fue en la década de los 60 y 70 que surgen varios artistas reivindicando el retorno de la samba tradicional: Chico Buarque de Holanda, Billy Blanco, Martinho da Vila, Paulinho da Viola… Junto con la reaparición de los veteranos: Candeia, Cartola, Nelson Cavaquinho y Zé Kéti.
En el incio de los 60, se crea el «Movimento de Revitalização do Samba de Raiz». Fue cuando apareció el bar Zicartola junto con los espectáculos de samba en el Teatro de Arena y en el Teatro Santa Rosa, y el musical «Rosa de Ouro». Producido por Hermínio Bello de Carvalho, «Rosa de Ouro» reveló a Araci Cortes y a Clementina de Jesus.
La década de los 70 está marcada por una revalorización de la samba con una nueva generación de músicos y compositores: Alcione, Beth Carvalho, Clara Nunes, Bezerra da Silva, João Nogueira, Nei Lopes, Roberto Ribeiro, Wilson Moreira, Paulinho da Viola, Martinho da Vila y Elton Medeiros.
Todos ellos junto con la «Velha Guarda» (los antiguos compositores), hacen renacer la samba de raíz y ésta vuelve a sonar en las radios y a llenar teatros.
A partir del año 2000 hasta el día de hoy, continúan surgiendo artistas que buscan aproximarse al estilo de samba que se consolidó en los morros cariocas, la auténtica samba de raíz.
Fue el caso de Marquinhos de Oswaldo Cruz, Teresa Cristina y el Grupo Semente entre otros, que contribuyeron a la rehabilitación de Lapa.
Actualmente, otros nombres han surgido en ese tradicional reducto de samba: Toninho Geraes, João Martins, Eliza Ador, Julio Estrela, Ana Costa, Moyseis Marques, Mosquito…
Deixa Falar
• En los años 30, un grupo de músicos liderados por Ismael Silva funda en el barrio de Estácio de Sá la primera escuela de samba, «Deixa falar».
• Transforman el género dándole un sonido más actual e introducen nuevos instrumentos como el surdo y la cuíca para que se adecúe mejor a los desfiles de carnaval. Más tarde surgieron Portela, Mangueira y Unidos da Tijuca.
• Heitor Dos Prazeres y otros músicos negros ven realizado su sueño de organizar asociaciones carnavalescas y producir un espectáculo elaborado.
• El término «escola de samba» fue adoptado porque en frente de la sede de «Deixa falar» había una escuela donde se enseñaba portugués y matemáticas. En «Deixa falar» se enseñaba samba.
• Por otro lado, también fue una tentativa de ganar aceptación y respeto por parte de los sambistas. La samba nacía en el morro y la «escuela» daba a los músicos un aspecto de organización que permitía romper las barreras sociales.
• La idea fue crear un bloco de carnaval que desfilase al son de la samba, al contrario de los ranchos que lo hacían al compás de marchas de carnaval.
• En 1932 el periodista deportivo Mario Filho, propietario del Mundo Sportivo, patrocina el primer concurso de escuelas de samba en la Plaza Once. Desfilaron 19 escuelas y la ganadora fue Estação Primeira de Mangueira. Portela, que por aquel entonces se llamaba Oswaldo Cruz, quedó en segundo lugar.